World Vision está liderando una estrategia regional en el Corredor Seco Centroamericano (CSC), una de las zonas más vulnerables al cambio climático, donde el 60% de las familias vive en precariedad. El enfoque central de la organización es la integración de la voz de niños y adolescentes para impulsar iniciativas que buscan el acceso universal al agua, la restauración de ecosistemas y la creación de comunidades resilientes.
La campaña «Esperanza para el Corredor Seco» se cimentó en un proceso participativo donde más de 1.200 niños y adolescentes expresaron sus preocupaciones sobre la deforestación, la escasez de agua y la necesidad de educación ambiental. Jorge Galeano, director del Bloque Centroamérica de World Vision, enfatizó la importancia de honrar estas aportaciones: “No vamos a eliminar los huracanes o las sequías, pero lo que sí podemos hacer es preparar a las comunidades para ser resilientes”.
Un ejemplo notable del impacto de esta visión integral es San Juan, Intibucá, Honduras. Tras 15 años de acompañamiento de World Vision, la comunidad logró la cobertura universal de agua potable y saneamiento. Este éxito generó un «círculo virtuoso» que redujo drásticamente la desnutrición crónica infantil, disminuyó la mortalidad materna y permitió que más de 2.100 niños dejaran el trabajo infantil.
World Vision subraya que la sostenibilidad de estas intervenciones depende de la corresponsabilidad entre comunidades, gobiernos locales y el sector privado. La meta es clara: transformar el CSC en un «corredor verde» donde los recursos se conviertan en una fuente de ingresos sostenibles para las familias.
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World Vision impulsa proyectos de agua y resiliencia en el Corredor Seco – Forbes Centroamérica